que nunca fui tuyo, aunque te lo pidiera,
que no hubo un nosotros,
pero que no existo sin ti.
Ahora entiendo por qué cojones no me encuentro
ni me quiero encontrar,
ahora entiendo que no me encuentro
porque estoy perdido en tus ojos,
mientras sigo soñando con tus labios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario