domingo, 28 de mayo de 2017

80's.

El guión de mi vida está sacado de una mala película de los ochenta. Ese chico fracasado, que no le falta de nada pero necesita de todo eso que no se consigue con el sueldo de sus padres funcionarios a final de mes. Ese que ya no busca el calor de una melena femenina, y sin embargo sigue perdiendo el culo cuando pasa por delante de sus ojos unos andares que padecen de perfección, mientras ondea el pelo de la chica como si de un barco pirata se tratase intentando abordar la barra de bar en la que le pilla siempre el destino con sus mierdas. Ese que necesita de vez en cuando un: "chiquitín, te echo de menos". O simplemente una mirada y un abrazo llenos de silencio cuando el cielo grita. Ese al que le acojonan los tequieros y los adioses casi a partes iguales. Ese que hoy clama y mañana será el mendigo de unos labios que no quieran escuchar todas la convicciones por las que los idolatro.
El guión de mi vida, visto desde un día de resaca, es la mayor mierda que alguien haya podido escribir. Mil defectos me avalan como el mayor desastre que hayan concebido la suerte y la cerveza.

domingo, 21 de mayo de 2017

Alone 4.0.

Soy un cuerpo lleno de cicatrices
que supura versos
con los dedos muertos
y los ojos tristes.

Soy un cúmulo de espinas,
un puñado de carencias,
un pecho que padece de inocencia,
un paseo grabado en la retina.

Soy el gilipollas de pecho vacío
que sonríe en el hastío
y camina corazón en mano.

Soy el beso en la mejilla de aquella noche
y el adiós que me queda sin reproches
por haber intentado seguir a tu lado.


domingo, 7 de mayo de 2017

Como cuando te miro.

Como alcohólico que empieza la noche bebiendo cerveza sin alcohol
para quitarse el mono
y termina enganchado a una botella de ron
bebiendo de ella como fuente de oro.
Como labios cortados
que agradecen el calor de otros labios,
como dedos sangrando
que se curan con la magia de los entrelazados,
como risas que alcanzan el cielo cuando se juntan, perversos,
dos versos
lanzándose tequieros suspirados.